Uno de los cambios significativos a nivel educacional que provocó la pandemia este 2020 fue la transición de una jornada de seis horas diarias presenciales de los escolares, a un modo online de clases a distancia que según cifras, en varios hogares costó sostener.
Con el fin de evaluar este método virtual, el Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE) de la Universidad de Chile encuestó a 4.912 padres y apoderados/as develando como principal análisis que el 25,2% dedica una hora diaria o menos a su educación y un 1,7% no destina nada de tiempo a sus actividades educativas.
Traducido a cifras concretas, 970 mil estudiantes estuvieron desconectados en sus estudios, situación que se vincula estrechamente con los niveles socioeconómicos de cada hogar. En el caso de los colegios municipales un 28% dedica una hora o menos a sus estudios, en los colegios particulares subvencionados un 30% y en los particulares pagados solo un 13% de los estudiantes.
Otra cifra preocupante, es que el 2,5% de los encuestados, afirma que su hijo continúan matriculados, pero en la práctica abandonaron sus estudios, lo que equivale a 90 mil estudiantes desertores.
Una de las autora del estudio, Mariana Contreras, explicó que las complicaciones relacionadas a la educación online son provocadas por factores como el acceso a tecnología y sitios donde estudiar: “Los estudiantes del nivel socioeconómico más bajo son los que dedican menos horas a las actividades escolares. Si no tienen internet, computador y espacio para estudiar, difícilmente los niños podrán dedicar tiempo al estudio”, indicó a La Tercera.
De igual forma, para más información respecto a la experiencia escolar y docente en contexto de pandemia, el CIAE dispuso la plataforma educaencasacovid.cl, en la cual también siguen aplicando encuestas a padres y apoderados de niños/as de 4 a 18 años, para medir sus procesos educativos.
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